Hoy es el Día Mundial del Medio Ambiente, y los problemas que amenazan nuestro planeta continúan aumentando.
Con la llegada del verano, el calendario se empieza a llenar con fechas de conciertos y festivales. Pero además de todo el divertimento y la buena música, hay que considerar el impacto ambiental provocado por los grandes festivales; la producción excesiva de deshechos, el consumo de energía y las emisiones de CO2 empiezan a ser preocupantes.
Sin embargo, organizar un festival eco-sostenible no es una utopía. Basta con adoptar algunas medidas concretas y cambiar nuestro comportamiento para que esto se convierta en un objetivo alcanzable.
Algunos de los principales festivales del mundo ya han empezado a hacer todo lo posible no solo para reducir su producción de deshechos, sino que también para que el tema “eco-sostenible” se convierta en norma.
Veamos que medidas han tomado.
GLASTONSBURY 2019
Según el periódico “The Guardian”, en el 2017 los fans utilizaron de más de 1,3 millones de botellas de plástico.
Glastonbury 2019, sin embargo, prohibirá la venta y el utilizo de botellas de plástico, a menos que sean reutilizables. Los stands solo podrán vender bebidas enlatadas, y para asegurarse de que el público esté bien hidratado, se le animará a traer su propria botella reutilizable y rellenarla en uno de los cientos de bebederos gratuitos que serán instalados alrededor del sitio.
SZIGET 2019
Además de haber prohibido la venta de botellas, cubiertos y platos de plástico y haber instalado bebederos gratuitos, los stands sólo distribuirán pajillas de plástico (reutilizables) a las personas que se las pidan explícitamente. El festival recomendará el utilizo de bicicletas para reducir las emisiones de CO2, ya que está dotado de un estacionamiento gratuito, servicios de mantenimiento y alquiler. En la zona de Camping Eco, cada visitante recibirá un bolso con un frasco y una bolsita para desperdicios. Y, por último, se repartirán 50.000 ceniceros portátiles para reducir aún más la producción de deshechos.
ISLE OF WIGHT 2019
Entre las actividades programadas para reducir el impacto ambiental del festival, los organizadores del Isle of Wight no solo utilizarán energía renovable y prohibirán el utilizo de plástico, sino que también ofrecerán el “Big Green Coach”: un autobús eco-sostenible que llevará los fans al festival. Ya que el transporte representa el 80% de las emisiones de CO2 de los grandes festivales, esta solución reducirá este porcentaje drásticamente.
BONNAROO 2019
Este festival americano tiene como objetivo no solo el de ser el mejor festival del mundo, sino que también el de ser el más eco-sostenible.
Bonnaroo ha obtenido excelentes resultados gracias a sus exitosas actividades educativas y sus talleres prácticos. El objetivo, según los organizadores, es el de educar a la gente para que, a su vez, vuelvan a sus casas con el conocimiento necesario para transmitir lo que aprendieron a sus familias y amigos.
SHAMBALA FESTIVAL 2019 Imagen | Daniel Farrell @ Shambala
El Shambala es uno de los festivales que más está involucrado en la temática de la eco-sostenibilidad. De hecho, en los últimos años, el festival ha logrado: reducir sus emisiones de CO2 en un 80%, prohibir el utilizo de plástico no reutilizable y utilizar energía renovable. Además, desde el 2016, Shambala ha prohibido la venta de pescado y carne, y ha adherido a estrictas políticas alimentarias. Más concretamente, los establecimientos gastronómicos:
- Solo podrán servir leche y productos lácteos 100% orgánicos;
- Solo podrán servir fruta y verdura proveniente del Reino Unido o de la UE – y solo bananas de Comercio Justo;
- No podrán servir productos de las marcas Coca-Cola y Nestlé;
- Solo podrán utilizar productos de limpieza no tóxicos y biodegradables.
Estas pequeñas medidas pueden hacernos tomar consciencia del daño que le estamos procurando a nuestro planeta, y ayudarnos a salvarlo.
Actuemos para che la música se convierta en un «abogado» del cambio, y luchemos para que nuestros festivales sean más eco-sostenibles.